14 oct 2009

Boys don't Cry


"Boy Interrupted" es un documental de la realizadora independiente Dana Perry. Se estrenó este año en el festival de Sundance y en HBO. La cinta trata la historia de Evan Scott Perry un niño de New York que desde temprana edad sufrió de profundas depresiones. Se le detectó una avanzada bipolaridad, a los 7 años el aún niño mostraba actitudes adolescentes, escuchaba Nirvana y su favorito: Bob Dylan.

La depresión hizo que renuncie a su infancia. Mientras los otros chicos jugaban él se dedicaba a escribir, a componer canciones y en más de una ocación intentó suicidarse. Su madre tomó fotografías de sus varios intentos ya que a nadie le parecía posible que eso un niño tan pequeño tenga pensamientos tan oscuros.

A los 9 años intentó lanzarse del techo de su escuela, inmediatamente fue internado en una clínica psiquiátrica; salió un tiempo después y siguió tomando Litio durante varios años. Lo internaron en una escuela donde aprendería reglas de comportamiento y durante una temporada pareció estable. Regresó a casa y se convirtió en un estudiante brillante y continúo con varios proyectos audiovisuales.



A los 15 decidieron retirar paulatinamente sus dosis de Litio. El joven parecía estar bien, pero la enfermedad nunca se detuvo. El joven prefirió esconder su enfermedad hasta un momento critico cuando a comienzos de Octubre de 2005 sin dar una sola señal a su familia se suicidó lanzándose de una ventana de sexto piso.



Este documental me afectó profundamente. La depresión es una enfermedad comparada con el cáncer, te va destruyendo por dentro, en fin... Me puse a pensar en mi entorno, todos tenemos aquel amigo de mirada sombría, que pareciese que caminara con una nube en la cabeza, yo logré disipar la mía pero todos los días pienso que es lo que todavía lo detiene de no correr hacia la ventana y acabar con todo.

Nadie tiene la responsabilidad de cargar con los problemas de los demás y las víctimas andantes tienden a apestar al tercer día que los ves. El suicida esconde sus intenciones bajo un velo impuesto por la sociedad misma. No hay nada que nadie pueda hacer por disipar aquella idea que ya está puesta como un gusano en la mente de quien va a tomar esa desición, pero ¿hay algo que la familia y los amigos podemos hacer aparte de preocuparnos?

Después de la muerte solo queda el silencio...

7 comentarios:

radicaLibre dijo...

"Amor y control" como lo dice el sabio Rubén Blades.

La familia puede hacer lo posible por ayudar, pero a la final cada quién es hacedor de su destino y dueño de su vida.

Venus dijo...

Buen post! Pero creo que paso del documental ultimamente necesito ver cosas felices... =)

SeñoritaCrisMa dijo...

reacción al término del post:
suspiro

leí una reseña hace tiempo y me olvidé de anotar el nombre...
gracias por recordármelo.

Unknown dijo...

Acabo de ver el documental, quede para adentro, si bien no soy, ver documentales tristes, de tanto en tanto te conectan con el mundo, para no andar parloteando por ahí sin ver a mi alrededor.

Carlos dijo...

Brother, yo aprendí y doy fé de que la depresión no es innata. Se adquiere, y es horrible vivir con algo tan denso al borde de la navaa -literalmene-, es tenaz llegar a comprender esta huevada cuando nunca antes conociste la tristeza.

Saludos bro.

Nachtgestalt dijo...

yo creo que la bipolarida y la depresión tarde o temprano puede acabar con tu vida, no importa cuan fuerte creas que eres, esto te carcome el alma, y poco a poco sientes el vacio que alguna ves ocupo tu corazón...

Daniel dijo...

Entiéndase que tal trastorno es netamente químico mental. El estado depresivo de Evan se escapaba de sus manos, no había nada, aparte de los fármacos fuertes que le recetaban (litio dosificado), que lo hiciera salir de tal agujero. Evan aprendió a disfrazar su estado, pues era la única manera de tener “libertad” de los ojos vigilantes de su familia que en la adolescencia no soportas. Su “cáncer” nunca desapareció. El suicidio, era antes o después, pero vendría. Evan supo que no tendría futuro, su enfermedad era más fuerte en el peor de los órganos donde pudo caer, la mente...